Tosta de Pimiento del piquillo, sardinilla y panceta de chato murciano
Esta tapa fue elaborada para una cata realizada en nuestra tienda para un grupo privado. Se disfruto acompañado del vino tarima blanco, ya que al ser un vino neutro y de acidez baja, no interfería en la tapa, resaltado los sabores de la misma.
la tosta de pimiento del piquillo, sardinilla y panceta de chato es una tapa muy sencilla pero de un sabor extraordinario, ya que la materia prima es de una calidad alta. Se podría decir que es un mar y tierra, ya que en su composición incluye elementos del mar y de la tierra. La unión entre los dos mundos esta en la emulsión elaborada entre el liquido de la conserva de pimientos del piquillo y el aceite de la lata de sardinillas.
Productos utilizados en la receta
El bote de pimientos del piquillo es de la empresa El Modesto, una empresa ubicada en Lorquí, especializada en elaborar conservas vegetales. En su catalogo disponen de alcachofas, tomate en conserva, espárragos y mermeladas.
Las sardinillas utilizadas en esta receta han sido de Ramón Franco, una de las empresas conserveras de pescados y mariscos mas importantes de Galicia. Las sardinillas son tostadas siguiendo una receta heredada desde 1960, las sardinillas se introducen a mano con cuidado en la lata. Allí se impregnan del suave sabor y aroma del aceite de oliva. Con el paso del tiempo, las sardinillas se vuelven todavía más sabrosas.
Por otro lado la panceta de chato murciano esta elaborado por la carnicería Fulgencio de Archena, nuestro proveedor de embutido de chato. El chato murciano es una raza autóctona española de cerdo de pelaje negro propia de la Región de Murcia y el sur de la Comunidad Valenciana, que se encuentra en fase de recuperación. Sus embutidos son muy sabrosos y destacan su panceta y la salchicha de repizco.
Tosta de Pimiento del piquillo, sardinilla y panceta de chato murciano
Ingredientes
Instrucciones
Con un cortar los pimientos del piquillo por la mitad y reservar.
Abrir la lata de sardinillas y con cuidado de no romper ponerlas en un plato. Con la ayuda de un colador colar el aceite de las sardinillas, añadir un poco del liquido del bote de los pimientos del piquillo, un chorro de limón y con la ayuda de un tenedor hacer una emulsión, añadiendo poco a poco aceite de oliva virgen extra hasta conseguir que se liguen.
Sobre la tostada colocamos una mitad de pimiento del piquillo, luego la sardinilla y dos trozos de panceta de chato finamente cortada.
Con ayuda de un soplete de cocina, calentamos la panceta para que suelte su grasa y dar un toque ahumado a la tapa.
Por último con ayuda de una cucharita ponemos un poco de emulsión por encima de la panceta
A disfrutar.
Nota
Esta tapa fue elaborada para una cata realizada en nuestra tienda para un grupo privado. Se disfruto acompañado del vino tarima blanco, ya que al ser un vino neutro y de acidez baja, no interfería en la tapa, resaltado los sabores de la misma.
